Es muy común que los niños tengan una curiosidad inmensa por descubrir el contenido de las ollas sobre la estufa, sin embargo ésto conlleva un alto riesgo de una quemadura por escaldadura, que es la que ocurre cuando líquidos a altas temperaturas tienen contacto con nuestra piel pudiendo provocar incluso quemaduras de tercer grado.
Ésto es lo que te recomiendo hacer, basado en algunos consejos de la Cruz Roja Mexicana:
Enfríe el área quemada con agua durante por lo menos 10 a 20 minutos. O use Gel para Quemaduras.
Haga reposar al pequeño haciéndolo sentir tan cómodo como sea posible, protegiendo las zonas quemadas del contacto con el suelo.
Suavemente remueva anillos, relojes, cinturones o cualquier ropaje ajustado del área afectada antes que empiece a hincharse.
Cubra la zona afectada sueltamente, con gasa esterilizada o material similar que no deje desprendimientos y proceda a vendar.
NO Remueva todo lo que está pegado a las quemaduras si hay peligro de desgarro.
NO aplique lociones, unguentos, manteca o grasa.
NO reviente las ampollas pues con ello interfiere sobre el área afectada.
NO sobre enfríe al paciente causándole escalofríos.
Si la respiración y el latido se detienen comience la resucitación inmediatamente,
Si el accidentado está inconsciente pero respira normalmente, colóquelo en la posición de recuperación. que consiste en colocar al niño de lado.
Es muy importante que llame a un servicio de emergencias, en México ya está disponible la marcación al 911 para asistencia médica.
Contacte a su dermatólogo para tratar las quemaduras de forma que se reduzca el riesgo de infección, mitigar el dolor y prevenir secuelas como cicatrización anormal.
No aplique jamás productos como Maizena o Harina.
Sobre todo, prevenga este tipo de accidentes, alejando a su pequeño de estos ambientes de peligro en el hogar.